Decir que Quillón es
comuna de emprendedores no es ninguna exageración, ya que día a día nacen
nuevas e innovadoras ideas que se desarrollan allí, apoyadas por la
municipalidad local. Y es que vivir en un valle de tierras fértiles es más que
una ventaja, así lo cree Pamela Merino, quien hace un año se dedica a la
elaboración de subproductos de la miel, apoyada por su esposo, Roberto Cabrera,
otro emprendedor apícola.
"Mi marido hace
15 años es apicultor, pero yo nunca pensé en trabajar en eso, porque soy
alérgica a las abejas. El año pasado tuve la oportunidad de aprender sobre la
fabricación de subproductos de la abeja y me gustó mucho, por lo que me empecé
a dedicar a esto y nos ha ido bastante bien", contó la emprendedora.
Miel natural,
multifrutal, con poleo y menta, son algunas de sus producciones. Sin embargo,
las más atractivas para los compradores han sido la miel batida con chocolate o
avellanas. Esta preparación gourmet llama la atención, además de su sabor, por
su consistencia, similar a un mousse.
"Por temporada
cosechamos más de 1.200 kilos de miel que se venden muy rápido. Entre abril y
mayo ya se han ido casi todos", señaló la mielera.
Apiequinotur
Si bien la producción
de subproductos mielíferos es el principal emprendimiento de Pamela Merino, su
visión ha ido más allá y hoy quiere aprovechar las más de 200 hectáreas donde
vive para desarrollar un Apiequinotur.
Esto consiste en un
recorrido que permitirá a los visitantes empaparse de la vida de campo y
conocer el duro trabajo de los apicultores.
"Nos interesa
mucho que la gente que venga se impregne del campo, que conozca de la crianza y
cuidado de los animales y principalmente de las abejas, de su gran importancia
para el mundo. Mi función con las abejas es la polinización en semilleros
(huertos) y la gente no conoce mucho de esto y su importancia, por lo mismo
queremos que aprendan y con ello también aprendan sobre cómo cuidar a las abejas",
explicó el apicultor Roberto Cabrera.
Ocho caballos y una
carretela ocuparán los Cabrera Merino para el traslado de quienes quieran
visitar su campo en el sector La Quebrada, a 14 kilómetros de Quillón, camino a
Cerro Negro. El paseo consistirá en la muestra de los árboles que polinizan las
abejas, que posteriormente saborizarán la miel, como peumos, acacios,
quillayes, entre otros.
Además, los turistas
podrán visitar los más de 300 colmenares que tiene la familia, el laboratorio
donde la emprendedora elabora sus variaciones mielíferas, la bodega donde
producen vino, entre otros atractivos que poseen sus fértiles terrenos.